El Monumento a la Fe Descubridora
Y arrancamos por uno de los lugares más simbólicos de la ciudad: el Monumento a la Fe Descubridora es uno de esos rincones fundamentales para entender la historia de Huelva. Porque es la ciudad desde donde partieron las naves que llevaron a Cristóbal Colón a descubrir América. Y esos onubenses marineros que lo acompañaron en tan magna hazaña se merecían un reconocimiento, ¿no crees? La inmensa escultura se encuentra en la confluencia entre los ríos Tinto y Odiel, en una zona conocida como Punta del Sebo, y fue obra de la americana Gertrude Vanderbilt Whitney, sucesora del mismísimo Rodin.
El monumento, de estilo cubista, representa a un navegante mirando hacia el oeste y mide nada menos que 37 metros de altura. Fue inaugurado en 1929 y bien merece la pena que te acerques hasta él, a unos kilómetros del centro de la ciudad, para pasear por sus alrededores y admirarlo. Será un primer contacto perfecto con la ciudad.
El Monasterio de la Rábida
Y ya que hablamos del descubrimiento de América, seguimos profundizando un poco más en la historia: nos vamos hasta el Monasterio de la Rábida, otro de los lugares imprescindibles que ver en Huelva. Y para ello lo único que tendrás que hacer será cruzar el río Tinto en dirección a Palos de la Frontera, a tan solo 15 minutos del centro de la capital.
Adéntrate en el monasterio, situado sobre una pequeña colina, y admira la imagen de Santa María la Rábida Nuestra Señora de los Milagros: ante ella rezó el mismísimo Cristóbal Colón –y los marineros que lo acompañaron- momentos antes de iniciar su cruzada hacia el Atlántico y terminar descubriendo América.
El edificio, de estilo gótico-mudéjar, fue levantado entre los siglos XIV y XV, y desde 1856 es considerado Monumento Nacional. En él está enterrado Martín Alonso Pinzón, que acompañó a Colón en su primer viaje a las Américas capitaneando la Pinta, una de las carabelas. Solo unos días después de regresar de aquella primera expedición, falleció, y desde entonces sus restos descansan en este hermoso lugar de Huelva.
Recréate recorriendo sus diferentes espacios y viaja con la imaginación al siglo XV. No será difícil: estarás en uno de los lugares históricos más especiales del sur.
El Monumento a Colón
Y, si al comienzo de este artículo hablábamos del monumento a aquellos descubridores que acompañaron a Cristóbal Colón en su histórica hazaña a las Américas, no íbamos a dejar de nombrar el que la ciudad onubense levantó en honor a él mismo, ¿no crees?
Así que acércate hasta la mítica Plaza de las Monjas, otro de esos lugares de Huelva que no debes perderte. Allí, en el centro, se levanta desde 2011 una escultura de tres metros de altura que representa al mismísimo Colón en el momento en el que avistó tierra. Su pose, sosteniendo en una mano la bandera de la Corona de Castilla y apuntando con la otra la dirección donde se encontraba la costa de América, es la que todos imaginamos cuando pensamos en ese histórico momento.
Fue el escultor Elías Rodríguez Picón el encargado de elaborarla para que decorara el centro de una de las plazas más importantes, antiguas y céntricas de la ciudad. La Plaza de las Monjas, que recibe el nombre por el Convento de las Madres Agustinas que se levantó en este mismo lugar a principios del siglo XVI, es uno de esos lugares clave en los comprobar cómo transcurre la vida cotidiana de la ciudad.
Aprovechando que te encuentras en ella, admira también la fachada del convento, que aún permanece en pie. También la del Banco de España, levantado a finales del siglo XIX. Una original manera de acercarte a la historia a través de la arquitectura de la ciudad.
La Catedral de la Merced
La preciosa fachada renacentista será lo primero que llame tu atención cuando te acerques hasta la Plaza de la Merced, el lugar donde se encuentra el principal templo religioso de la capital onubense: su catedral.
Este precioso edificio se levantó en el siglo XVII, pero quedó destrozado tras sufrir en dos ocasiones los efectos de un terremoto: el de Lisboa en 1775 y otro ya entrado el siglo XX. Reconstruido en prácticamente su totalidad, sirvió como hospital de guerra durante la Guerra Civil y, aún hoy, hay quienes aseguran que por sus pasillos se escuchan ruidos extraños y se dan apariciones de fantasmas…
Aun así, y a pesar de lo intrigante que pueda suponer su lado más espectral, no está de más que te acerques a la catedral, que dedica desde hace años parte de su edificio a la Universidad, y recorras algunos de sus pasillos y naves. En el interior podrás contemplar las tallas del Cristo de Jerusalén y la imagen de la Virgen de la Cinta, patrona de Huelva.
El Muelle de las Carabelas
Y de nuevo Colón se convierte en el protagonista de nuestras propuestas de cosas que ver en Huelva. O, mejor dicho, el acontecimiento del descubrimiento de América en sí mismo. Porque si los marineros que se aventuraron en las aguas de Atlántico son merecedores del reconocimiento de todo el mundo, los barcos en los que llegaron hasta el Nuevo Continente, también se merecen toda nuestra admiración, ¿no crees?
Así que ponemos rumbo, una vez más, a la vecina Palos de la Frontera para rendir homenaje a La Pinta, La Niña y la Santa María, ni más ni menos. En el Museo Muelle de las Carabelas descansan las tres réplicas de estos míticos barcos construidos en 1992 para celebrar el V centenario del descubrimiento.
Además de las naves en sí mismas, otro de los grandes reclamos turísticos del lugar es su interesante centro de interpretación, donde podrás acceder a toda la información relacionada con el hito histórico. Recorre el barrio medieval que se ha recreado en torno a la dársena donde se encuentran los tres navíos, o acércate hasta la Isla del Encuentro, en la que se ha recreado la cultura indígena de la isla de Guanahani, el lugar donde desembarcó por primera vez Cristóbal Colón, el 12 de octubre de 1492, y a la que bautizó como San Salvador.